Es el presidente de Estudiantes de San Luis y antes pasó por Talleres de Córdoba. También se relaciona al narcotráfico.
Buenos Aires, 4 de setiembre.(caraycecaonline) Martín Lanatta denunció ante la jueza María Servini de Cubría que fue dos veces a la casa de un mexicano a retirar bolsos repletos de dinero para el jefe de Gabinete Aníbal Fernández. En total, trasladó 5,2 millones de dólares, vinculados al negocio de la efedrina. ¿Quién es el misterioso mexicano? Se trata de Carlos Agustín Ahumada Kurtz, un empresario argentino-mexicano que incursionó en el mundo del fútbol hace más de una década. En México también es muy conocido porque protagonizó un escándalo político y terminó en la cárcel. Luego acumuló denuncias por supuestas maniobras de lavado con dinero proveniente del narcotráfico. Actualmente preside el club Estudiantes de San Luis, la institución “protegida” por Julio Grondona, según las escuchas que reveló el programa La Cornisa.
Lanatta, condenado por el Triple Crimen, vinculó directamente a Ahumada en el negocio de la efedrina. Relató que fue dos veces a su casa, en Riobamba al 1200, junto al misterioso agente de inteligencia conocido como “Máximo”, a quien la Justicia aún no pudo identificar. “Una vez retiré 2 millones de dólares, de esa gestión yo recibo 20.000 dólares que lo sacan del mismo bolso; y en la segunda oportunidad retiramos 3.200.000 de dólares y en esa ocasión me dan 30.000”, relató. Las dos veces fueron al domicilio de Fernández, en Solis al 300, siempre según el testimonio de Lanatta, al que accedió Clarín.
El condenado aseguró que estuvo en el hall del edificio del empresario mexicano, a quien describió como “una persona de tez trigueña, de aproximadamente 1,70 y de pelo oscuro”. Cuando le preguntaron por las fechas de los supuestos traslados de dinero, mencionó los meses de junio y julio de 2008.
Consultado por este diario, Ahumada dijo ayer que “no recibía gente en el hall” de su edificio, aunque no descartó conocer a Lanatta. “Tendría que ver una foto, tal vez lo conozco. En ese momento yo ya estaba gerenciando Talleres de Córdoba, me entrevistaba con varias personas del mundo del fútbol, generalmente era en un bar”, explicó. Pero descartó cualquier vinculación con la efedrina. “Soy una de las personas más investigadas en el mundo en los últimos 10 años, pero se dicen muchas barbaridades, son todas denuncias políticas”.
Ahumada es argentino de nacimiento pero habla con puro acento mexicano. A los 9 años se fue a vivir a ese país. Incursionó en diferentes rubros hasta que en 2002 desembarcó en el mundo del fútbol. Primero en el León FC y luego en el Santos Laguna. En 2004, protagonizó un escándalo político: se filmó entregando dinero a políticos cercanos a Andrés López Obrador, quien tuvo que bajarse de su candidatura presidencial. Ahumada terminó detenido 1131 días. Su regreso al país se concretó el 9 de julio de 2007, el día que nevó en Buenos Aires. Vivió varios meses en el hotel Panamericano hasta que volvió a radicarse en Córdoba, donde gerenció el club Talleres junto a Carlos Granero, hermano del ex titular de la Sedronar, José, procesado por la jueza Servini de Cubría. La relación entre ellos terminó en Tribunales, con juicios cruzados. “Me hizo juicio y me embargaron hasta el departamento pero ya le gané”, aseguró ayer.
Durante su gestión en Talleres, Ahumada convocó a Humberto Grondona como DT. Pronto también establecería una estrecha relación con el entonces presidente de la AFA. “A Don Julio lo admiraba en muchas cosas”, reconoció. El vínculo se destapó a través de una escucha judicial en la que Grondona le pedía a Gustavo Ceresa, ex presidente del Consejo Federal, por Estudiantes de San Luis: “Es el único equipo que me interesa”.
Martín Lanatta sigue detenido en la cárcel de General Alvear bajo medidas extremas de seguridad, pero no terminó de declarar. Servini de Cubría volverá a citarlo luego de resolver la situación de los hermanos Zacarías.(www.caraycecaonline.com.ar)