Abril llega con el apresamiento de Ricardo Jaime junto a las primeras citaciones judiciales para quienes esquilmaron la República durante tanto tiempo. (por jorge Avila)
Buenos Aires, 2 de abril.(caraycecaonline) Los primeros logros del gobierno encabezado por Mauricio Macri, han dejado en evidencia la cantidad de intereses afectados por la búsqueda de un reordenamiento del Estado y la economía nacional. Queda también al desnudo la oscura trama de sátrapas y oportunistas ,confabulados hace rato, para entorpecer el crecimiento de nuestro país.
Nadie puede sentirse sorprendido por el accionar de un gobierno que, desde su trabajosa asunción, puso en marcha todos los anuncios que había realizado durante su campaña electoral. Levantó las restricciones cambiarias, mantiene la flotación controlada del dólar, promociona la producción agrícola al quitar las retenciones al campo, y teje con éxito los acuerdos parlamentarios para cancelar la deuda externa.Todos son parte del programa de la coalición que derrotó al kirchnerismo. Lo son además la reestructuración del Estado ,un nuevo esquema tarifario, y la continuidad de las negociaciones paritarias libres con los sectores empresariales y sindicales.
Sin embargo, las presiones parecen recrudecer cuando es tiempo de dejar de lado el realismo mágico fruto de esquemas de pensamientos perimidos. Desde luego, es costoso dejar una calamitosa política de tarifas subsidiadas, destinada a mantener la infraestructura obsoleta que solo beneficia a los empresarios «amigos» del poder, para encarar, en cambio,una escala realista, donde los recursos estén al servicio de los usuarios. Ahora, será el Estado el garante del cumplimiento efectivo de todos las concesiones, y el encargado de desplazar a quienes desde hace largo rato medran con los retazos de un encuadre privatista de mero lucro.
No en vano, esos representantes de la supuesta «burguesía nacional» surgida en la «década ganada», en primer lugar alzaron sus voces contra las medidas de ajuste del equipo económico. Es tiempo de comprender que ya no queda margen para el beneficio de unos pocos en detrimento de todos. Luego de conocer el desastroso estado de las finanzas nacionales, la población muestra madurez y tolerancia, esperanzado en un nuevo tiempo que se insinúa auspicioso. Tras cerrar el «default», las inversiones no llegarán de inmediato, pero la apertura internacional comenzó a dar sus primeros frutos. Es razonable que exista reticencia, ya que el esquema financiero aún no se ha revertido, pero la política monetaria se muestra sólida y realista, con un Banco Central activo, y organismos de control en pleno funcionamiento.
Pero básicamente, se ha retornado al debate en el propio seno del gobierno. Las reuniones de gabinete, los plenarios ampliados con los integrantes de la coalición, e incluso la convocatoria a los opositores, muestran una clima democrático que se había extraviado en los meandros del relato.
Marzo terminó con un crimen atroz, en pleno microcentro, cometido por un integrante de la saga de «valijeros» que tuvieron su esplendor durante el anterior gobierno. Abril llega con el apresamiento de Ricardo Jaime junto a las primeras citaciones judiciales para quienes esquilmaron la República durante tanto tiempo. El desfile por los tribunales promete ser extenso. En el fuego cruzado del otoño, surge para el gobierno un tiempo de definiciones para en superar una coyuntura difícil en el camino hacia la consolidación de un proyecto.(www.caraycecaonline.com.ar)