«La política está enferma, muy enferma, en América Latina. Hay excepciones pero, en general, está más enferma que sana«, dijo ante los obispos peruanos con los que se reunió esta mañana en el palacio arzobispal.
Culminará la visita a Perú con una misa masiva en la base aérea de Las Palmas, al sur de la capital y aguardan la asistencia de un millón de personas.