Editoriales La semana política

El menor daño

Macri al concluir el G20 en Japón

Aún así, se logra un acuerdo histórico con la Uníón Europea, que brinda un nuevo horizonte a nuestra economía. Pero la campaña  electoral   exige que se lo critique. También la tozudez K desconoce   cada  una de la numerosas obras pùblicas. Simple canibalismo opositor. Eso si. Ya nadie habla de la economía. Baja el dólar, aminora la infación y repunta el empleo. (Por Jorge Augusto Avila)

Buenos  Aires, 6 de julio.(caraycecaonline)  Nadie esta conforme. Y encima hace frío y gente que muere en la calle, Sin embargo, el proceso electoral avanza. A tropezones y evidencias. No cesa de mostrar las carencias y las íntimas certezas de los postulantes. Sus ambiciones y sus miserias. Una muchacha llamada Florencia no duda en dejar su pequeña hija Helena a miles de kilómetros para eludir la cárcel. Su suegro, un criminal llamado Fernando Vaca Narvaja la critica, pero no en público. Es candidato del kirchnerismo luego de negociar su indulto con Menem hace 20 años. La abuela Cristina, ex mandataria procesada, con pedido de prisión, aprovecha la estadía en Cuba de la joven madre , para escapar del mayor juicio de la historia sobre manipulación en la obra pública, y viaja a visitarla con la anuencia de jueces que todavía responden a la «justicia legítima». Alberto, el discreto candidato de la fórmula, visita en Brasil al ex presidente condenado por corrupción, y sigue su ruta en busca de lograr la impunidad de los kirchneristas encarcelados. Varios con condena firme. Tampoco en el oficialismo son todas virtudes. Después del apagón mayor las empresas responden tras 15 días. Es cierto, en otro gobierno hubieran «arreglado». Igual es demasiado tiempo. En la calle hay gente que muere por desidia, a veces de los gobiernos provinciales, pero también por la ausencia de suficiente ayuda oficial. Es  mitigada la primera ola polar con carpas calefaccionadas, alimentos y reparto de ropa, pero sin un plan concreto para erradicar la situación. Construír más albergues y articular junto a las ONG y la secretaría de Salud una estrategia de contención, incluso para quienes son sobornados para permanecer por conveniencia electoral. Sería un  comienzo. Aún así, se logra un acuerdo histórico con la Uníón Europea, que brinda un nuevo horizonte a nuestra economía. Pero la campaña  electoral   exige que se lo critique. También la tozudez K desconoce   cada  una de la numerosas obras pùblicas. Simple canibalismo opositor. Eso si. Ya nadie habla de la economía. Baja el dólar, aminora la infación y repunta el empleo. Pero quedan sòlo   como datos estadísticos, dada la tibieza del gobierno   para publicar  esos logros. La «avenida del medio», poco concurrida, parece agotarse en internismos. Y hasta la izquierda, revive  su inveterado divisionismo, al dejar de lado a su dirigente emblema, por » envejecimiento intelectual».  En tanto los sindicalistas son capaces de parar sectores clave, como el aeronáutico o el logístico, para ensanchar  sus bolsillos, perjudicar  a los compatriotas  que inician sus vacaciones de invierno y dañar   a nuestra línea de bandera, sin importarle nada.  El apoyo a los Fernández  lo justifica Los «empresaurios» se llenan de elogios, pero son incapaces de emprender una modernización seria de las industrias, las finanzas y el comercio. Insisten con el capitalismo keynesiano o prebendario. La lucha continúa.  En las calles, la gente pide más. Los inconformistas todavía replican a los responsables. Tomemos conciencia a la hora de enfrentar las urnas. Tratemos de hacer el menor daño posible con nuestro voto. Apelemos la responsabilidad social, para optar por lo positivo y solidario como obligación para hacer todos los días una sociedad más justa. Claro que todo puede mejorar como lo ha hecho la economía. No hace falta ningún experimento sociológico para entenderlo. Pero esta, es una construcción en progreso. No alcanza con discursos grandilocuentes ni proyectos retornables.(www.caraycecaonline.com.ar )
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