Para la Casa Rosada será el día clave: agotadas las instancias de debate de los referentes económicos, en caso de no alcanzarse un acuerdo sobre el porcentaje a reducir, se dará por finalizada la negociación y el Presidente definirá el número junto a sus colaboradores.
Sobre la conveniencia política de ejecutar esta propuesta se explica la dureza que mostraron los interlocutores del Gobierno nacional en los encuentros con sus pares de Ciudad. Mientras el equipo enviado por el jefe de Gobierno porteño,
Horacio Rodríguez Larreta; que encabezó el ministro de Hacienda, Martín Mura, deslizó que estaría dispuesto a aceptar un recorte de medio punto porcentual; la secretaria de Relaciones con las Provincias, Silvina Batakis, se mantuvo firme en la intención que la Casa Rosada fijó desde el primer minuto que instaló el tema en la agenda:
reducir 1,1% la coparticipación, cifra que -considera- cedió de más a la Capital con el traspaso de la Policía.
Aunque no se habló de los $127 mil millones que el Gobierno denunció que la Ciudad recibió de más entre 2016 y 2019 por la suma de ese 1,1% de más, y tampoco hubo cruces por el traspaso de los inmuebles que ordenó Macri a días de dejar el poder; la funcionaria que responde al ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro; expuso al detalle cómo se conforma ese excedente. «Ellos dicen que tenemos que financiar todo el sistema de Seguridad y nosotros sólo lo que les transferimos, es decir la Policía, ahí está la diferencia», indicaron fuentes nacionales al tanto del desarrollo de esa reunión.
Como último recurso, podría haber una contrapropuesta que contemple partir la diferencia. Es decir, sugerir un recorte de 0,8%, en el que todos de algún modo terminen cediendo. «No va a ser feliz para nadie, pero es la única salida posible, en la que a nadie le salga tan caro», planteaba un alto funcionario porteño.