Hace dos semanas, en su carta de renuncia, el juez aseguró que fue “víctima de una persecución” durante el macrismo. Luego, avanzó en los procesamientos contra ex funcionarios del gobierno anterior.
Buenos Aires, 28 de julio 2020. (caraycecaonline) Mañana, cuando cumpla los 75 años, Rodolfo Canicoba Corral dejará de ser juez tras 27 años al frente del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 6. Hace dos semanas, en su última intervención pública, el polémico magistrado asediado por expedientes calientes en el Consejo de la Magistratura, había asegurado en una entrevista que estaba «hastiado de los últimos cuatro años de erosión permanente» en una referencia a lo que consideraba una «persecución» del gobierno de Mauricio Macri.
Pero incluso fue por más y en su carta de renuncia como juez dejó por escrito su malestar con la gestión anterior de la que decía sentirse una víctima. «Sin haber quebrado mi voluntad, sufrí estos últimos cuatro años una feroz campaña de difamación y persecución mediático/política de medios y de diversas agencias que respondían al gobierno de entonces».
Más allá de las responsabilidades que les puedan caber a los ex funcionarios macristas -los acusan de beneficiar a una empresa de la familia del ex presidente-, los veloces procesamientos de Canicoba Corral contrastan con su historial como juez, muchas veces señalado como un experto en cajonear expedientes a la espera de los tiempos políticos adecuados. En el macrismo hablan de «venganza» y de una «causa política».
Las tensiones entre Canicoba y Cambiemos son de larga data. Al inicio de la gestión Macri, el Gobierno había intentado desplazar al juez. Envalentonado con la renuncia de Norberto Oyarbide -otro juez polémico multi denunciado- buscaron repetir la maniobra. Pero el magistrado resistió y logró mantenerse en su despacho sin renunciar.
Canicoba vive en una mansión en Vicente López, viaja regularmente a Punta del Este, tiene habilitación para manejar autos de alta gama y durante la cuarentena empezó a habitar una casa que cuesta US$ 3.200 de alquiler en un club hípico.
Cuando deje de ser juez todas esas causas en su contra en la Magistratura se cerrarán inmediatamente y ya no tendrá ningún expediente que le genere dolores de cabeza. Otro beneficio de su retirada: gozará de una suculenta jubilación como magistrado de al menos $300.000 al mes.(www.caraycecaonline.com.ar)