El ajuste de Milei es por el desastre que consumó de Massa
Se puede discutir sobre cómo hacer el ajuste, no sobre la necesidad de hacerlo. El ajuste lo paga la gente. Milei tiene carta blanca, no se sabe por cuánto tiempo
Se puede discutir sobre cómo hacer el ajuste, no sobre la necesidad de hacerlo. El ajuste lo paga la gente. Milei tiene carta blanca, no se sabe por cuánto tiempo
El Presidente poseía hace días sobre la inevitabilidad de decisiones drásticas. No parece verdad que se hubiera resistido. Le sonaba conveniente –se lo dijo a sus ministros más cercanos– una progresión durante la semana pasada hasta llegar al extremo. ¿Por qué? “Le temía al estallido de una psicosis colectiva. No en vano los argentinos somos argentinos. Cosas van a suceder igual. Pero espero que nunca fuera de control”, comenta el mandatario.
Suena poco creíble que el único ejecutor pueda ser el títere presidencial,o la desquiciada, más allá de su sed de venganza. Convendría apuntar hacia aquel que fue a la vez oficial de inteligencia de Montoneros y personal civil de Inteligencia de la Fuerza Aérea(por Jorge Augusto Avila)
Todo este «remedio populista», acompañado por la llegada de «perseguidos» como Evo Morales tras su fraude electoral en Bolivia, sin los dólares, yuanes o rublos bolivarianos y el implemento de emergencias (alimentaria, sanitaria y económica) pondrán a prueba el nuevo Congreso, bajo la batuta de Sergio Massa. (Por Jorge Augusto Avila)
Lo cierto es que en la mayoría de los países los controles de precios se utilizaron de manera excepcional, ante circunstancias bélicas o casos de emergencia para luego ser abolidos. En Argentina es diferente. .(Jorge Augusto Avila)
Las encuestas muestran, además, que la popularidad de las ideas ‘liberales’ o ‘neoliberales’ es especialmente alta entre los más jóvenes. Para ser precisos, más del 50 por ciento de los jóvenes encuestados se coloca dentro de esta definición ideológica, muy por encima que cualquier otro grupo. (.Por Jorge Augusto Avila)
Es vital saber a quién designarán Canciller. Hoy en día, el cargo más importante a cubrir. ( por Alejandro Borensztein)
No hace pié, en este agitado escenario, el «renovado» kirchnerismo oscurantista, que apela a soluciones dignas del realismo bananero, como su tarjeta de alimentos contra el hambre, avalada por Bergoglio, Tinelli, y Carlotto.
«Vencer y dormirse en los laureles es una derrota. Perder y no rendirse es una victoria». Los resultados electorales en nuestro país permiten remitir a tal aserto (Por Jorge Augusto Avila)
Entre lo neceesario y lo urgente, la fiesta kirchnerista, tendrá nuevamente un costo, que solo sabremos cuando regrese un gobierno creíble.(Por Jorge Augusto Avila)