El intento de amedrentamiento incluía también a su precandidato a vice, Hécto “Toty” Flores y a una de su precandidata a diputada por Buenos Aires, Marcela Campagnoli, hermana del fiscal José María, ex investigador del caso Báez.
Buenos Aires, 7 de agosto.(caraycecaonline) Tres balas calibre 38 envueltas en papel, dos guardadas en una caja de color azul, cada una señalizada con iniciales obvias de posibles víctimas y un texto en el que se le pide que deje investigar al narcotráfico, como si el escrito estuviera escrito por un jefe de una organización importante dedicada a la venta de droga.
Anoche, Elisa Carrió cerró su acto de campaña como precandidata presidencial de “Cambiemos” en el Palais Rouge sabiendo que le habían dejado ese mensaje, que la policía describió como mafioso.
El intento de amedrentamiento incluía también a su precandidato a vice, Hécto “Toty” Flores y a una de su precandidata a diputada por Buenos Aires, Marcela Campagnoli, hermana del fiscal José María, ex investigador del caso Báez.
En el acto de anoche, Carrió no le contó a su audiencia lo que estaba pasando. Clarín pudo saber que la hoy diputada no quiere darle mayor trascendencia al tema, pero sí hizo una denuncia por intimidación pública ante el juzgado de María Romilda Servini de Cubría.
Servini es la magistrada electoral, que además investiga el caso de la efedrina que involucra a funcionarios K, y que esta misma semana sufrió un extraño ataque: uno de los autos de su custodia fue baleado por supuestos ladrones. Al otro día apedrearon el edificio en el que vive Jorge Lanata, en donde también aparecieron balas a pocos metros del lugar.
Servini, Carrió y Lanata denunciaron en los últimos días que el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, estuvo vinculado al tráfico de precursores químicos utilizados para fabricar drogas sintéticas. (www.caraycecaonline.com.ar)