El juez de la localidad de Jáchal, Pablo Oritja, imputó al jefe de Procesos de Veladero, Leandro Poblete, por el delito de «contaminar el agua de manera negligente».
Buenos Aires, 9 de octubre.(carayceaonline) La Justicia parece haberse puesto los pantalones largos y empezar a investigar con profundidad el derrame de más de un millón de litros de solución cianurada por parte de la multinacional minera Barrick Gold en la provincia de San Juan.
El juez de la localidad de Jáchal, Pablo Oritja, imputó al jefe de Procesos de Veladero, Leandro Poblete, por el delito de «contaminar el agua de manera negligente». El directivo de la minera había sido ya imputado por el magistrado por haber sido un presunto infractor del artículo 56 de la Ley 24.051, que contempla penas de hasta dos años de prisión.
Para el magistrado, Poblete fue una de las autoridades centrales de la Barrick Gold que habían firmado el acta de apertura de la compuerta del canal del Norte, que fue por donde se filtró la solución cianurada hacia los cauces de agua, en lugar de terminar en las piletas de contingencia, tras romperse la válvula de la cañería que transportaba el líquido. Esta situación provocó que se derramara hacia los ríos el cianuro que afecta con extrema gravedad a las personas que viven en las localidades cercanas a la mina.
Las palabras de Poblete ante Oritja justificando su accionar ante esta catástrofe ecológica, no fueron lo suficientemente convincentes, lo que originó que el juez dictaminara su imputación.
De esta manera, los directivos centrales de la multinacional minera en el país comienzan a rendir cuentas ante la Justicia, evidenciando un cambio de época y que deja en evidencia cómo con el final de ciclo K, comienzan a caer muchos de sus máximos postulados, como la defensa a ultranza de la megaminería contaminante que tanto daño ha hecho en el interior profundo de la Argentina. (www.caraycecaonline.com.ar)
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