Concedió el amparo pedido por el gobierno porteño en reclamo por el cobro de 1,8 millones de pesos por Impuesto a las Ganancias adeudados desde enero 2010 hasta diciembre 2015
Buenos Aires, 13 de junio.(caraycecaonline) La dura batalla del gobierno porteño para cobrar la millonaria deuda que Cristóbal López mantiene con la Ciudad por no haber pagado el impuesto a los Ingresos Brutos correspondiente a las máquinas tragamonedas instaladas en el hipódromo, tuvo esta mañana un nuevo e importante capítulo: un juez aceptó el amparo solicitado por la Ciudad para inhibir todos los bienes de la titular de esa explotación, la Unión Transitoria de Empresas (UTE) integrada por Hipódromo Argentino de Palermo y Casino Club, la empresa de López.
Esta mañana, el juez Martín Converset decidió conceder la medida que habían pedido los abogados del gobierno porteño, que intenta cobrarle a López 1,8 millones de pesos por el capital acumulado del impuesto que no se cobró entre enero de 2010 y diciembre del 2015.
Aunque aún está vigente otra medida cautelar que ordena al gobierno abstenerse de llevar a cabo toda medida tendiente a cobrar el impuesto a los Ingresos Brutos al Hipódromo Argentino de Palermo SA, el juez Converset aceptó el nuevo enfoque de la Ciudad, que pidió la inhibición de bienes sobre la UTE integrada por el Hipódromo y Casino Club, la empresa de López que efectivamente maneja las maquinitas.
Según la sentencia judicial , «la»UTE» resulta» ser «un sujeto tributario distinto de las sociedades que la integran», y «que» ésta» desarrolla» como actividad la explotación de máquinas tragamonedas y juegos de azar, «actividad que se encuentra inequívocamente alcanzada por el impuesto sobre los ingresos brutos.»
El juez, además, concedió el amparo atento a los «graves perjuicios» que podrían aparejar para el fisco «la eventual desmembración, separación y/o desapoderamiento de las firmas que conforman la UTE, y la posibilidad de que un pronunciamiento judicial tardío pueda tornar ilusorio el derecho invocado».
El nuevo traspié de Cristóbal López se suma a la ofensiva del gobierno nacional para cobrarle los 8.000 millones de pesos del impuesto a las naftas que a través de su empresa Oil retuvo a sus clientes pero no tributó. La acumulación de reclamos por deudas con el Estado que gracias a la intimidad con el gobierno kirchnerista no le eran reclamadas, y el nuevo clima que se respira en los tribunales están cerrando el cerco sobre el zar del juego K.(www.caraycecaonline.com.ar)