La señal de TV del Grupo Indalo siente el impacto de la quiebra de su accionista mayoritario, aunque desde la firma intentan llevar tranquilidad a sus empleados.
Buenos Aires, 25 de junio.(caraycecaonline) La quiebra de Oil Combustibles, decretada por el juez comercial Javier Cosentino, impacta de lleno en C5N. Es que el canal de noticias de Cristóbal López y Fabián de Sousa está en concurso de acreedores y tiene como su principal accionista a la petrolera quebrada, lo cual coloca a la firma en un escenario incierto. El canal tiene un déficit mensual de 1,3 millón de pesos y necesita 10 millones de dólares para sanear su estructura financiera y operativa. El juez Cosentino dio hasta el 17 de mayo para que los acreedores «verifiquen sus créditos». Pero con sus dueños presos y acusados por defraudar al Estado, los caminos se le cierran a C5N.
«El canal no es autosustentable, pero puede serlo con un importante reordenamiento», dijeron desde la firma a Clarín; aunque ahora «todo se complica con la quiebra», agregaron. Si bien desvincularon a más de 200 empleados desde 2016, la empresa aduce una cantidad de personal superior a lo que el canal hoy necesita para funcionar.
En cambio, desde la conducción del canal intentan llevar tranquilidad a sus empleados y le dijeron a Clarín que la quiebra de Oil Combustibles «no tiene ningún impacto en la operatoria de C5N». Incluso trataron de minimizar el rol de la petrolera en el control accionario del canal.
Sin embargo, según la documentación que tiene el juez Cosentino, como en un juego de muñecas rusas, que se van encastrando unas dentro de otras, figura que la empresa Telepiú es la controladora de C5N. Y que el 80% de Telepiu es de South Media Investments, de la cual el 94,34% es de Oil Combustibles. Es por eso que la quiebra de la petrolera impacta en forma directa sobre el canal de noticias de López y De Sousa.
Según la Justicia, Telepiú fue adquirida en 2012 a Daniel Hadad con el dinero que Oil Combustibles no tributó al fisco en concepto del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC), generando una deuda de 8.000 millones de pesos con el Estado. En esa época, C5N no tenía deudas con el Estado y sus empleados cobraban los salarios sin inconvenientes. Pero la decisión política de controlar los medios mediante el desembarco de empresarios alineados con el kirchnerismo, provocó la situación actual.
De hecho, sumando las deudas de las otras empresas de Grupo Indalo, a la fecha ya supera los 20.000 millones de pesos, contabilizando intereses y punitorios. Fue esta maniobra la que les valió un procesamiento -y ahora la cárcel- a López y De Sousa por defraudación agravada.
Desde que desembarcaron con fuerza en el sector de los medios de comunicación, en 2012, los empresarios K gastaron más de 250 millones de dólares en la adquisición de diarios, radios, canales de noticias productoras de TV, que pusieron al servicio del «relato kirchnerista». A cambio, la entonces presidenta Cristina Kirchner les permitió no pagar el ITC de su petrolera Oil Combustibles, cuando la AFIP era manejada por Ricardo Echegaray. (www.caraycecaonline.com.ar)