El ex mandatario manifestó que el Ejecutivo dejará un «déficit que nadie lo puede terminar de calcular», que estimó en más de 10 puntos. «Es un desastre que no se vio nunca», sentenció.
No obstante le pidió al ministro de Economía, Sergio Massa: «Aunque sea por una vez piense en algo que sea bueno para el futuro de los argentinos, no esto de hacer malabarismo para lograr un parche más, una avivada más, que nos entierra más hacia el futuro».
«Es una bomba o un campo minado. Salir del cepo va a ser muy costoso y la verdad es que no hay más dolares en el Banco Central, estamos entrando en dólares negativos, que significa usar depósitos en dólares de la gente», advirtió.
Además, vaticinó que la próxima gestión va a tener un costo inicial «enorme», debido a que va a requerir altos niveles de explicación respecto a las medidas que se van a tener que tomar en los primeros momentos de gobierno.
En ese sentido, remarcó que el próximo presidente de la Nación debe tener «coraje», tras la advertencia de algunos dirigentes sindicales que «ya anunciaron que vuelven con las piedras».
La referencia es a los incidentes que se produjeron en las afueras del Congreso el 18 de diciembre de 2017, cuando se trataba en el recinto de Movilidad Jubilatoria propuesta por el gobierno de Cambiemos. Desde el entonces, denuncian que en esa jornada se arrojaron «14 toneladas de piedras» contra las fuerzas de seguridad.
Sin embargo, Macri consideró que actualmente existe otra convicción respecto de la sociedad argentina sobre las «consecuencias del despilfarro populista».
«Siento que hay una fortaleza distinta en los argentinos y nos da una verdadera y gran oportunidad de cambiar la historia y que empiece un ciclo de desarrollo, crecimiento, un esfuerzo compartido, recuperando la cultura del trabajo, que -de vuelta- no son ideas macristas. La cultura del trabajo, el mérito, el esfuerzo personal, el valor de la palabra, la transparencia, son valores que están en la Humanidad y que han aplicado a todos los países que les han ido bien cuando a nosotros nos ha ido mal», sentenció.
Macri en la interna en la Ciudad
En las declaraciones radiales, Macri volvió a respaldar la candidatura a jefe de Gobierno de su primo, Jorge Macri, y le bajó el pulgar al candidato radical, Martín Lousteau.
«Más allá del respeto que tengo a Lousteau, no, el PRO ha marcado rumbo de modernidad y calidad en la gestión que lo tiene que seguir marcando el capitán y tenemos a alguien muy preparado. Lamento que no haya sido producto que se pensó desde la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, pero Jorge Macri tiene una experiencia única que yo no tuve», expresó en diálogo con Mitre.
Además, señaló que Horacio Rodríguez Larreta va a terminar apoyando la candidatura de su actual jefe de Gabinete «porque las cosas caen por su peso propio». (www.caraycecaonline.com.ar)